21 de agosto de 2021, Molinos
Algo que nos conecta
Pedalear por el Maestrazgo es un regalo para los sentidos. En esta etapa tuvimos la fortuna de pedalear junto a 6 maravillosas mujeres que nos llenaron de alegría en una dura ascensión por una pista de tierra y piedras, muy cerquita de Molinos. El esfuerzo mereció la pena, tras unos manguerazos de agua fría, disfrutamos de un paisaje espectacular en un lugar con una energía que nos traspasó: Q Centro de experimentación.
Neus y María Jesús llegaron hace 11 años a este rincón, una de las zonas más deshabitadas de Europa. Neus nos decía: “desde que llegué aquí, caminando por las lomas y senderos, sentí que había una energía de humildad y purificación, una belleza oculta, y una riqueza por descubrir. Detrás de la aparente pobreza hay una gran riqueza como territorio, como energía, como “pachamama” de Teruel”.
Q es un pequeño lugar de retiro donde experimentar una vida simple que permite poner la máxima consciencia posible en los actos cotidianos. Se rige por: la vida solar, una alimentación ecológica adaptada a lo local y de temporada, y el trabajo personal. “Es un buen lugar para retirarse individualmente o en grupos pequeños y trabajar esos tres aspectos. La vida solar es la forma más básica y ancestral de integrarse en el medio, alineando nuestros biorritmos a los ritmos de la luz solar y organizando el trabajo de cada día según la luz del sol y temperatura de cada estación. No necesitamos reloj en el valle. De noche prima el descanso y el recogimiento, escribir, meditar, hacer yoga… De día prima la acción hacia fuera, media jornada para el bien común (huerto, mantenimientos, doméstica, cocina, oficina), la otra mitad es tiempo personal (hobbies, estudio, paseo, cada cual lo que necesite)” nos explicó Neus.
Q destila reflexión, coherencia y consciencia. Nace de dos fuentes, el activismo social y la espiritualidad. En el 2001 Neus vivió los movimientos antiglobalización en Barcelona, “me llevó a cuestionarme qué estaba pasando, y sentí la necesidad de hacer algo por la democracia y por la paz”. El activismo, el propio instinto y sentido común la conectaron con el decrecimiento y la implicación en temas sociales. Así fue que puso en marcha la página web quelcom.net.
“Al poco tiempo surge en mí la necesidad de recogimiento, de comprenderme, de búsqueda interna. Es así como la parte social activista y el trabajo interior confluyen en un solo impulso: ‹‹vivir consciente››. Q no es más que el intento de vivir así”. Esto la llevó a la naturaleza, “sentí la llamada de conectar con lo elemental, con la esencia. Somos naturaleza antes que cultura. Por mucho que nuestra cultura sea en apariencia muy sofisticada, mientras no nos reconozcamos como parte de la naturaleza estamos perdiendo una dimensión fundamental de lo que es un ser humano”. Neus decidió “volver a casa, a la base. Que no era mi ciudad natal, Lleida, sino la Naturaleza. Y estar ahí de continuo, no sólo de fin de semana”. Del 2004 al 2009, estuvo buscando lugares y posibles comunidades. “La vida, si estás atenta para escuchar lo que internamente sientes, hace que poco a poco lleguen espacios y personas”. Hacia el final del proceso de gestación de Q apareció María Jesús sumando ilusión, fuerza y economía: “nos cruzamos con ideas parecidas. Vivíamos sin nevera, no tomábamos comida procesada, minimizábamos los residuos plásticos y consumíamos de manera consciente. Si convives con alguien es importante que en lo cotidiano tengamos criterios parecidos”, nos contaba Neus. Hace 11 años que comenzó el proyecto Q en el Maestrazgo.
“Llegamos aquí sin saber apenas nada de la vida rural. Queríamos retirarnos pero antes teníamos que pasar por los aprendizajes básicos para sobrevivir: leña, herramientas, morteros, aprender a identificar brotes y plantas…” Neus nos contaba que fue un proceso lento aunque totalmente necesario. “En la urbe vivimos idealizando el campo. La vida del campo es dura aunque privilegiada. Cuando vives en la ciudad das a un botón y tienes luz, calor o frío; es muy cómoda. Hemos de revalorizar el esfuerzo”. En el campo todo requiere observación, previsión y esfuerzo. Tras pasar el primer año en una yurta, construyeron la casa central aprovechando las ruinas de un corral. Un espacio casi diáfano con un altillo y dos alcobas. Techos altos de madera y grandes ventanales. Todo en Q es armonioso y bello, cada detalle tiene su función. Q cuenta además con una cabaña de retiro individual y dos cabañas donde se alojan Neus y María Jesús.
Estructuralmente, Q se inspiró en la Triformación Social de Rudolf Steiner, la cual es reinterpretada de acuerdo a tres esferas fundamentales de lo social: la económica (la gestión de lo material), la ética (los valores y principios de las relaciones cotidianas) y la esfera espiritual (tu vínculo con lo trascendente). “Lo importante es que a medida que uno cambia individualmente, ese cambio interior, si es real, si no es pseudo-cambio, va a provocar un cambio exterior, reduciendo consumo, consumiendo más conscientemente, tratando las cosas de otra manera, trabajando con otra actitud, etc. Todo el trabajo que haces interiormente si no redunda en un cambio exterior no tiene sentido”. En Q Centro hay muchas aun cosas por desarrollar: el proyecto agroecológico, la gestión del agua y la leña, etc. “se pueden crear tantas ramas como personas quieran formar parte de Q y desarrollar sus caminos. Para ello es necesario que esas personas lleguen y se impliquen”.
En Q se realizan estancias de retiro o de voluntariado. En los primeros 7 años de andadura se han hecho retiros de espiritualidad, creatividad, salud holística y permacultura, siempre facilitando herramientas para la transformación interior. También se han organizado algunos eventos y jornadas, entre ellos destacó en 2016 Encuentros sobre la vejez y la muerte, y en 2020-2021 “Sumando Visiones, hacia un nuevo modelo”. Neus tiene una increíble capacidad de conectar realidades y personas, de identificar los puntos de acción con una visión integradora. Las palabras de Neus nos hicieron reflexionar “es importante actuar, pero antes has de ver. Hay mucho activismo dando palos de ciego porque falta la visión. Y la visión la encuentras en el trabajo interior”.
Compartimos pensamientos sobre el momento actual. “El viejo sistema está colapsando en todos los niveles: educativo, sanitario, territorial, económico… Hay prácticas e ideologías que están entrando cada vez con más fuerza en lo social en las que el ser humano no está en el centro del debate y la naturaleza está completamente apartada”.
Recopilamos varios elementos clave para la urgente transformación: el decrecimiento, la soberanía y la relocalización. La receta del decrecimiento consiste en hacer más y mejor con menos, pero también en reducir, desacelerar y, por ende, resistir al imperio de la velocidad y a las tendencias. Para Neus el decrecimiento y la austeridad “es una opción personal, si uno no lo ve no lo va a entender. Mucha gente lo asocia con pobreza, no es así. Vas a ir a menos en las cosas que tú decides y que decrezcas en eso quiere decir que vas a crecer en otras cosas. Mi proceso de autoconocimento me llevó al decrecimiento. Necesitas menos cosas, pesas menos”. Respecto a la soberanía coincidimos con Neus en que “no podemos estar dormidos eternamente. Hay un momento que tienes que tomar consciencia, empoderarte y decidir por ti”. Y para todo esto es esencial la relocalización, recuperar control sobre las propias economías y reconstruir los vínculos en las comunidades. Cada territorio debe ser gestionado por sus custodios, valorando y preservando los recursos naturales y culturales. Lo que no puede ser es que alguien en Bélgica o en Madrid decida por ti. La soberanía es imprescindible como proceso de maduración social”. El futuro es local.
En palabras de Q centro:
Cada respiración consciente te ubica en el presente.
Conéctate con la naturaleza:
un pájaro, una nube, una hormiga, una brizna de hierva, un viento, …Armoniza tu actividad con el ciclo de la luz solar.
Usa móvil y wiffi lo indispensable.
Aprende a estar contigo mism@ sin mediaciones tecnológicas.Observa sin juzgar tus inercias y tus máscaras, conócete a ti mism@.
Come sano, sin fertilizantes ni pesticidas químicos, ni transgénicos.